El Perú conoce una gran diversidad de manifestaciones religiosas tradicionales. Algunas de ellas se sostienen con prodigalidad de alimentos y alcohol, y profusión de manifestaciones artísticas, como bandas musicales y comparsas que representan diversidad de personajes. Estos revelan formas de interpretar procesos históricos. Especial atención merecen aquellos ajenos al ámbito local: negros, selváticos, altiplánicos; también personajes preternaturales, como demonios. Estos se evidencian en el disfraz y LA MÁSCARA.
Aquí se expone parte de ese aspecto, LA MÁSCARA, a partir de LA FIESTA DE LA VIRGEN DEL CARMEN DE PAUCARTAMBO, en el Cusco. Y lo hace con las obras de un artista popular.
Si bien la producción de las máscaras es cultural, el artista es el único que domina la técnica de su producción física. Él es creador, si bien no autónomo. Propone relecturas en las representaciones de los personajes o los mantiene de modo conservador, dentro de un proceso no exento de polémica.
Esta exposición distingue: la producción, las máscaras; la técnica o conocimiento de la producción; y la visión, mentalidad o piedad, del mascarero, MARIO PALOMINO COLL-CÁRDENAS.
